Puente de Arganda
¿Sabías que antes del Puente de Arganda actual hubo otros puentes que se hundieron?
Antes de la construcción de los primeros puentes, el paso por el río Jarama se realizaba en una barca propiedad del Rey y de la villa de Arganda, era conocida como “Barca de Arganda”, medía entre 13 y 6 metros y podía transportar viajeros, caballerías y carros con sus mercancías.
El primer puente que se construye es de madera, se inaugura en 1818 y se mantiene en pie hasta el 13 de abril de 1831 cuando se derrumba. A partir de ese año se inician las obras de un puente colgante compuesto de tres tramos de 60 metros que también se hunde el 1 de diciembre de 1858 en el momento justo en el que pasaba un carro de cuatro caballos conducido por dos labradores de Perales de Tajuña. El derrumbe no se cobró la vida de los labradores gracias a la intervención del argandeño Esteban Fernández que les salvó la vida en una intervención heroica.
Rápidamente se reconstruye el puente colgante aunque vuelve a dar problemas, teniendo que ser reparado en distintas ocasiones, la última a cargo del ingeniero Eugenio Barrón y Avignon, el mismo arquitecto que proyecta el puente de hierro actual, aunque no llegó a ejecutarlo porque falleció en 1892. En 1910 se erige el puente actual, que es una notable obra de ingeniería y uno de los símbolos más conocidos de nuestra localidad.